Hoteles cerca del Royal Reserve, Auckland

En el sitio web ya se puede ver que esta propiedad necesita una renovación muy prolongada. Las habitaciones que en el edificio original no son sonido, tienen cosas que fueron comunes en los años ochenta y nunca volverán y en algún sentido no pueden hacerse cargo de dónde está el mercado objetivo. El spa es excelente y la comida está en el menú. Pero se prepárese para comer esta comida maravillosa en un restaurante antiguo. Pero con una maravillosa vista a Auckland. El personal parece estar aquí, pero no se presta atención a los detalles. Un correo electrónico enviado a mí antes de mi estancia me hablaba de una carretera que se cerraría en quizás algo, mientras la reserva fue hecho en julio para agosto... además, asegúrese de limpiar en la parte superior de los tapones en las habitaciones de los huéspedes también ¿Por qué el bar en el acogedor salón de incendios se ilumina como un árbol de Navidad que se desvía de la atmósfera? Y ¿por qué la música está muy lejos en comparación con la atmósfera que desea crear aquí (y sólo sonido en la zona de recepción por otra vez... los oradores que se remontan a los años ochenta y crean un doble pedazo de emoción? Sólo un par de ejemplos de las muchas cosas que hemos visto... Con tanto potencial, parece lógico que un inversor la compre al hacer los cambios necesarios en todas las perspectivas.

Instalaciones limpias e higiénicas, bien equipadas, muy buen servicio, transporte conveniente, Uber para viajar cerca no es caro, el desayuno es bueno y rico. Una gran experiencia. La habitación estaba muy silenciosa. El desayuno es sencillo pero real. Hay un menú fijo para el almuerzo. Aunque la cantidad es menor, hay entremeses, platos principales y postres. El conserje es muy activo en llevar equipaje y es conveniente tomar prestados paraguas. Lo único malo es que la cama de la habitación doble es demasiado pequeña, se estima que solo mide 90 cm de ancho.

No hay instrucciones sobre dónde estacionar en la llegada y los 2 espacios delante del hotel tenían taxis en ellos. Tuvimos que estacionar dos veces mientras yo corriba por la carretera para pedir. Nos dijeron que simplemente pasemos por el parque de autos subterráneos. No hay servicio valet. Cuando volvimos a la recepción con nuestros bolsillos del parque de autos, el consejero de la mesa delantera parecía muy ininteresado y casi rudo. No hubo conversación ni sonrisas. No habíamos reservado un paquete de amantes y esto no se mencionó. Nos dio la oportunidad de llegar a nuestra habitación y queríamos tener champagne a la llegada. Me dio la pregunta y fue otro, más bonito, más guapo. Dijo que sí, parece que deberías tener una botella y dijo que alguien la traería de inmediato. La habitación era muy buena, pero no me gustaba la habitación. En el hotel, el hotel está muy bien situado, pero no hay nada que pueda hacer. Sin decirnos mucho cuando le expliqué que teníamos un paquete que incluía esto que él miraba y luego se fue a buscar nuestro coche sin decirnos esto es lo que estaba haciendo. El hotel es bonito y qvale, pero su personal serio te deja bajar y no me gustaría quedarme de nuevo, ni recomendarle a los amigos. Sólo una buena parte fue el bar de techo donde el personal era mucho más amigable. Eso ha arruinado la experiencia para nosotros de tener una noche en la ciudad para reconectarnos de los niños.

Estaba en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de la ciudad, en el centro de El personal de recepción era muy bueno, especialmente Shane, que era increíblemente personal y útil, fue arriba y más allá para asegurarme de que tenía todo lo que necesitaba.

Como iba a quedarme en Auckland durante 10 días, necesitaba cocinar yo mismo de vez en cuando. También quería que el hotel me proporcionara el desayuno y no quería que la habitación fuera demasiado pequeña. La mejor ubicación era en el centro de la ciudad. , así que elegí este hotel. Ubicación: Está a unos 500 metros de la Sky Tower y muy cerca de Queen Street. Es muy conveniente caminar hasta el centro de la ciudad y el puerto todos los días. Habitación: El área de unos 35 metros cuadrados es perfecta, pero la altura del piso es un poco baja, por lo que se siente un poco deprimente. La habitación dispone de utensilios de cocina sencillos (1 olla sopera y 1 wok), vajilla desechable, así como sal y pimienta. También hay muchas bolsitas de té y café, chocolate en polvo. Servicio: El personal de recepción saludará cortésmente a todos cuando los vean y el servicio de habitaciones limpiará la habitación todos los días. Una vez salimos y no tuvimos tiempo de lavar las ollas. Cuando regresamos, encontramos que el camarero había lavado todos nuestros utensilios de cocina, lo cual fue realmente vergonzoso. Hardware del hotel: además de ofrecer desayuno todos los días, el restaurante del vestíbulo también puede almorzar y cenar aquí. A veces trabajo en el restaurante del vestíbulo con mi ordenador, lo cual es más cómodo que trabajar en la habitación. El hotel también cuenta con una cafetería y un piano, donde los huéspedes tocan todos los días. Desayuno: 30 dólares neozelandeses por persona, casi lo mismo todos los días. La variedad no es rica, pero en general es aceptable. Ahora quiero hablar de lo más destacado de este hotel, que es que está muy cerca de la estación de autobuses del aeropuerto. Solo se tarda 2 minutos en llegar. El autobús sale cada 30 minutos. y está a una parada directamente del aeropuerto. Es muy, muy conveniente, 18 dólares neozelandeses por persona, no hay necesidad de tomar un taxi. No es de extrañar que haya muchos tripulantes de cabina de aerolíneas alojados en este hotel. Todavía consideraré este hotel la próxima vez que venga a Auckland.

Muy bien situado y servicio. Estaba en la suite M, que era increíblemente espaciosa y cómoda. El desayuno era muy bueno. Sería segura de quedarse aquí pronto.

Céntrico, agradable y ordenado! Realmente me gustó el calentador de agua en la habitación.

TLDR: no aircon, constant power cuts, paper thin walls.. Where do I start. First off there’s no aircon so the rooms are hot and uncomfortable. There are ducted low speed fans which don’t do much. But the biggest problem is the fact the rooms are on what I believe to be motion sensors or some kind of timers so ALL power turns off every 25 seconds, this is not an exaggeration. This includes the lights, jug, the fan - everything. I stubbed my toes in the dark because the lights turned off while I was walking around, and they wouldn’t turn back on. Showering in the dark due the lights constantly on and off. Good luck making a coffee, showering, watching TV or anything without that being interrupted by constant power cuts which drive you mad. I booked the small room. They look small in the photos but even smaller in person and I felt like I was suffocating, the rooms are tiny so heat up like crazy. The smallest hotel room I’ve ever seen. Also the walls are paper thin so I could hear my neighbours conversations word for word.. even with ear plugs. If there was air con and sound proof walls, I could have put up with the extremely small space. Terrible experience. Don’t even bother with this place. The Abstract had a lot of potential as they have decorated it very nicely but they have let themselves down. It is also in a dangerous area of Auckland central so you will want to make sure you are back in your room by dark, lots of drunk homeless people around. After my first night of zero sleep due to the heat, stuffiness and neighbours chatting, I complained and had my room kindly upgraded to a larger one, but the same issues remained of constant power cuts and no air con in that room too. At least it was a bit cooler due to being larger and an extra window, also had no neighbours.. The customer service was pretty good. There is no parking on site so you have to park in a carpark building across the road. The food in the restaurant was average but has a beautiful outdoor dining area which was the highlight.

Mi marido se quedó aquí una vez por casualidad y ahora se ha convertido en el lugar que se queda la mayoría de las semanas, Grandes, limpias, tranquilas habitaciones, equipadas con todo lo que necesitas, máquina de café, microondas, TV de pantalla grande, la cama más comfísta y un enorme baño con ducha buena . Pero lo mejor de lo lejos es el personal, desde el servicio de bienvenida y atención, no podía pedir más, pocos toques como recordar sus nombres, significa mucho.... Tener que dar una mención especial a Pawan, es como un amigo que te saluda, una verdadera bienvenida amistosa cada vez, hace que te sientas como si estuvieras en casa. Gracias Pawan!