Buen hotel xon una pesima responsable en recepcion a la llegada y salida unica nots negsativs de un buen hotel con un extraordinario servcio en el desayuno en anritsar ciudad para visitar el templo dorado y la exhibición en la frontera de wagah atari Vista del Templo Dorado El oro y el barro. La inmortalidad y el cuerpo imperecedero. El poder y el derrumbe. El Templo Dorado encandila con el oro puro de su cúpula y entorna los ojos de los peregrinos que acuden a él para encontrar pan y consuelo, dos valores que en India escasean tanto como las promesas. Hasta cinco alimentos se sirven en el plato que le dan a cada uno que lo desee En Amritsar, capital de Punjab, tan cerca de Pakistán, los sijs tienen su Meca. Al menos una vez en su vida deben venerar el hogar que alberga el libro sagrado que, desde hace cuatrocientos años, ”duerme” en cuna de oro mientras sus feligreses a duras penas se acobijan en el suelo. Ahí, en medio de un lago artificial con aguas que ellos llaman néctar y con la cual se ”bautizan” en un ritual bellísimo de honor y homenaje, los sij (y también los turistas) recorren las paredes de mármol con dibujos artesanales que glorifican aún más el dorado del oro. Puertas adentro, es otra historia. El hambre se mezcla con el entusiasmo de los voluntarios que amasan el paan, cortan verduras y mezclan los masala en ollas tan gigantes como el apetito de sus comensales. Que pasan de a cinco, de a diez, de a cien, sin hablar casi, con la mirada baja y la mano extendida, mientras toman su escudilla de acero perfectamente lavada y se sientan en fila india, justamente, hasta que uno de los salones queda lleno de bocas que apenas se abren para comer y agradecer. La imagen conmueve, pero no es inmóvil. En menos de veinte minutos los comensales se van e ingresan otros. Cinco, diez mil, veinte mil. Lo que el cuerpo necesite y las ollas aguanten.COMIDA DE AMRITSAR Amritsar es un paraíso para los amantes de la comida. Desde el momento en que te despiertas, la cantidad de comida de Amritsar que podrás comer es una revelación. Por desayuno elija entre aloo puris (curry de papa servido con pan indiano frito relleno de requesón) o chole puri (el mismo pan servido con lentejas picantes). Kanha Sweets o Munim di Hatti en Lawrence Road son los mejores lugares para probarlos. Por almorzar te sugiero que visites el Golden Temple Langar. O intente visitar Kulcha Land, donde por solo INR 50-100 sirven excelentes kulchas rellenas y lassi. Si le queda espacio para la cena, diríjase a Bharwan ka dhaba o Kesar ka dhaba, para un poco de rajma (frijoles rojos) y arroz, o tandoori roti y verduras. Si no has notado que sí, hay un ligero sesgo, soy vegetariano. La comida del norte de India en general es un poco pesada para el estómago, pero comer comida de Amritsar es tan divertido que no puedes parar. En cada esquina de cada calle hay algo que se cocina. Desde alu tikkis hasta jugo de fruta fresca, todo es tan sabroso y delicioso que no puedes dejar de deli
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