Hostel Camino de Finisterre

Nos nos esperábamos un alojamiento de tanto nivel en todos los aspectos. Los dueños, gente encantadora, amable y servicial. De todos los alojamientos en que hemos estado, es el único que recomiendo al cien por cien. Muchísimas gracias.

El albergue es una pasada, ya que parece un hotel, con piscina, super limpio y las camas son una pasada de cómodas. A nivel de infraestructura, es de los mejores albergues en los que he estado cuando hago el camino. Estuvimos 4 amigos en una habitación para esa capacidad, estábamos haciendo el camino de Santiago. Lo que desmerece el albergue es la persona que lo regenta, pocas explicaciones a la llegada, maneras bruscas pero lo que más nos impactó fue que no llevaba mascarilla mientras nos atendía (al aire libre lo puedo entender, pero no cuando estábamos dentro) Uno de mis amigos se lo preguntó y dijo que él llevaba 1 año sin ponérsela y en su pizzería tampoco, y que por él no hacía falta que la llevásemos... me parece "fenomenal" pero cuando se regenta un negocio, tiene que llevarla, por respeto y protección de las personas con las que trata. No nos explicó nada de si tenían desayuno o qué servicios podríamos tener. No volvería, simplemente por quien está llevándolo y por ello para mí baja la puntuación general que he dado al albergue.